Con la estrategia de marketing claramente definida, entramos en la fase de ejecución y seguimiento. Esta etapa es esencial para llevar a cabo todas las actividades planificadas y garantizar que estemos alcanzando los objetivos establecidos. Aquí te cuento cómo abordamos esta fase crucial:
Implementación: Cada elemento de la estrategia se implementa de manera coherente y eficiente. Ya sea el lanzamiento de un nuevo sitio web, de un podcast, la activación de campañas publicitarias o la gestión activa de las redes sociales, cada tarea se realiza según lo programado.
Supervisión continua: No pierdo de vista el progreso. Utilizo herramientas de seguimiento y análisis para evaluar cómo se están desempeñando las estrategias. Esto nos permite identificar oportunidades para la mejora y ajustar la táctica según sea necesario.
Comunicación abierta: Mantengo líneas de comunicación abiertas contigo durante todo el proceso de ejecución. Reporto regularmente sobre los avances, proporcionando informes sobre métricas clave y respondiendo a cualquier pregunta o inquietud que puedas tener.